Del Otoño a la Primavera

Ya te acercas sigiloso Otoño traicionero.Pasa de largo y rápido:Otoño-guadañero!
Te conozco de sobra,de otros intentos,de cuando la desidia me embargaba.Pero mi voluntad sún no ha muerto.pues sigue siendo hermoso pensar y querer; y no deseo que la vida se tome "la pena de matarme" por no tomarme yo "la pena de vivir".

Este Otoño volveré a ver como " las hojas caen; caen como de lejos, como marchitas en los lejanos jardines del cielo: caen con ademán de negación"." Y, en las noches cae la pesada tierra desde todos los astros en la soledad"."Todos caemos.Esa mano cae.Fijate en los demás: igual en todos"." Y, sinembargo hay Uno que sostiene esta caida con suavidad inmensa entre sus manos"(Rainer Maria Rilke en "Otoño" del Libro de las imágenes).

Soy consciente de la contingencia de mi ser; el "no-ser"me limita ontologicamente,con su final de "otoño-guadañero";y, mientras tanto, devora cada uno de mis instantes.

Señor: Que brote en mi el deseo. Que me tensen y empujen los deseos. Que yo los controlaré suavemente, como el salmista: los allanaré y aquietaré,tal cual niño en brazos maternos,como niño sostendré mis deseos.

Como el salmista abandonaré mi vida en las manos de ese Uno, hasta que en primavera luzca su hermosura,y en el verano comiencen a germinar los granos,sus tallos y broten las espigas.Dejame, cual grano maduro transformarme después en otra espiga al pudrirme en la tierra sementera.

No permitas que sea con la guadaña.Prefiero morir en primavera.