La realidad de cualquier acontecimiento
Bajo una gran palmera
sentado en la arena
de la orilla del mar
puedo alegre disfrutar
de este tiempo otoñal
como un acontecimiento banal
con el que llevar las penas.
Es apenas un hecho efímeroes
un momento puntual
futil,monótono,intimista
que tuvo también su pasado
y que presagia otros futuros
tozudamente constituye lo real
nada que ver con lo soñado,
ni se deja influir por el pasado,
él es así de contundente
y le tienes que dejar estar
porque es futil,monótono e intimista
y,al fín y al cabo lo verás pasar.
Esta palmera se enraizó con la brisa
del mar, que no pudo envejecer;
y sólo cuando se embravece
pierde el color de su sonrisa
y brama y rompe con sus olas
la pobre y simple arena de la orilla.
?Cuándo se formó esta playa ¿
sin duda no fué ayer
y sinembargo el mar no puede envejecer...
Este acontecimiento real
que no imaginado
también fué por alguien soñado
como el viento al dispersar las nubes
antes movió las aguas de los mares.
Porque también conspiran los silencios
secretamente en los días luminosos
moviendo de las aguas sus entrañas
como ladrones sigilosos
alterando la vida de su fauna.
No es casual aquí mi estancia
ni mi visión soñada
ni se interrumpe la mirada
ni se dispersa
ni se desvanece en la memoria.
Es una realidad aferrada
al curso de la vida
sin temor a ser olvidada
acompañándome muy queda
quedamente dentro del alms
de ella siempre enamorada.
sentado en la arena
de la orilla del mar
puedo alegre disfrutar
de este tiempo otoñal
como un acontecimiento banal
con el que llevar las penas.
Es apenas un hecho efímeroes
un momento puntual
futil,monótono,intimista
que tuvo también su pasado
y que presagia otros futuros
tozudamente constituye lo real
nada que ver con lo soñado,
ni se deja influir por el pasado,
él es así de contundente
y le tienes que dejar estar
porque es futil,monótono e intimista
y,al fín y al cabo lo verás pasar.
Esta palmera se enraizó con la brisa
del mar, que no pudo envejecer;
y sólo cuando se embravece
pierde el color de su sonrisa
y brama y rompe con sus olas
la pobre y simple arena de la orilla.
?Cuándo se formó esta playa ¿
sin duda no fué ayer
y sinembargo el mar no puede envejecer...
Este acontecimiento real
que no imaginado
también fué por alguien soñado
como el viento al dispersar las nubes
antes movió las aguas de los mares.
Porque también conspiran los silencios
secretamente en los días luminosos
moviendo de las aguas sus entrañas
como ladrones sigilosos
alterando la vida de su fauna.
No es casual aquí mi estancia
ni mi visión soñada
ni se interrumpe la mirada
ni se dispersa
ni se desvanece en la memoria.
Es una realidad aferrada
al curso de la vida
sin temor a ser olvidada
acompañándome muy queda
quedamente dentro del alms
de ella siempre enamorada.
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